Existe un grupo de infecciones que tienen importancia reproductiva y en el embarazo, la mayoría de ellas, son causadas por gérmenes que son lábiles en el medio ambiente, por lo que no sobreviven mucho tiempo fuera del cuerpo humano o de sus secresiones, por lo cual para su transmisión requieren de un contacto continuo y cercano de allí que se transmitan mediante las relaciones sexuales.
Las enfermedades de transmisión sexual constituyen un tema bastante amplio que tocaremos en otro post, hablaremos de algunas que específicamente pueden afectar el embarazo y otras que no se transmiten sexualmente pero también pueden ser causa de morbilidad, conceptos que pueden cambiar con el tiempo como desarrollaremos.
La posibilidad de una enfermedad infecciosa que pase desapercibida y que pueda afectar al embarazo es una preocupación constante, principalmente si ése efecto es evitable.

Desde el punto de vista funcional, el cuerpo humano es una eficiente conjunción de sistemas, es el producto de cientos de miles de años de evolución, uno de los sistemas que garantizan la vida es el sistema inmunológico, un sistema encargado de conocer lo que es propio del cuerpo y rechazar lo que es extraño y todo lo que pueda constituir una amenaza. Es un sistema extraordinariamente complejo y que su fallo puede llevar a la muerte por infecciones que normalmente no afectan a una persona sana, o su exceso de función es el responsable de algunas enfermedades como las alergias, el lupus o el reumatismo para mencionar algunas.
Una de las formas que tiene el cuerpo de defenderse contra agentes infecciosos son los anticuerpos, que los producen células especializadas, luego de que un agente infeccioso se ha puesto en contacto con el sistema inmune, previniendo que la infección se vuelva a producir, puesto que ya las defensas se encuentran preparadas para atacarle. En ésta capacidad se basa la eficacia de las vacunas.

Una forma indirecta de saber si una embarazada ha estado en contacto con un agente determinando es evaluar la huella inmunológica, predecible que deja en el sistema inmune. Es decir medir los anticuerpos que tiene la embarazada contra determinado organismo, como los anticuerpos circulan en el plasma sanguíneo o suero, las pruebas para medir los anticuerpos en suero se denominan serologías.
Lo que quiere decir que una serología positiva no significa que el patógeno que buscamos se encuentra en el cuerpo en ése momento si no que el sistema inmunológico ha estado en contacto con el agente infeccioso, viendo el tipo de anticuerpos se puede inferir si la infección es reciente o antigua. Una prueba de anticuerpos negativa, sugiere que no ha habido contacto con la bacteria o parásito en cuestión (agentes infecciosos). O que ha habido un contacto y todavía no se han desarrollado anticuerpos, de allí que las pruebas serológicas se repitan para evaluar si se han hecho positivas con el tiempo, sobre todo en poblaciones de riesgo. Así mismo una prueba serológica negativa sugiere posibilidad de contraer la infección en un futuro, puesto que sugiere que aún no se han desarrollado defensas contra ella.
Las serologías que se suelen realizar durante el embarazo constituyen las siguientes:
- Anticuerpos contra los eritrocitos (prueba de coombs) ésta aunque no mide anticuerpos contra infecciones, si establece la posibilidad de que haya riesgo de anemia fetal.
- Serología de HIV, Sífilis, Hepatitis B, enfermedades que implican tomar previsiones de tratamiento durante el embarazo, parto y puerperio que pueden prevenir infección fetal.
- Serologia para toxoplasma: se trata de una infección de animales donde el ser humano es un huésped intermediario, pero que puede causar enfermedad en el feto, una enfermedad rara donde existen medidas de higiene de alimentos mínima, pero que constituye una causa prevenible de enfermedad fetal.
- Otras serologías infecciosas como la de rubeola que en caso de ser negativa, establece el riesgo de contraer una enfermedad que tiene un índice importante de afectación fetal.
- Serología de Chagas en las que provengan de áreas endémicas, como son el continente americano.
- Serologias asociadas a afectación fetal si se precisan o se sospechan usualmente se relacionan con hallazgos en una ecografia que puede sugerir un problema fetal infeccioso, como la infección por citomegalovirus, parvovirus, varicela zoster y cualquier otra que se considere conveniente.
La positividad o negatividad de éstas pruebas cuando están indicadas, establecen una serie de recomendaciones individualizadas. De las cuales hablaremos en entregas siguientes.
Recordar que este post tiene una intención meramente informativa y que no sustituye el buen consejo que pueda suministrar un profesional de su confianza.
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