En cuanto a los beneficios y riesgos del consumo de alcohol la información médica puede ser algo confusa, sobre todo por que se suelen mesclar conceptos como abuso de alcohol, alcoholismo , consumo compulsivo, ebriedad, que pueden dificultar establecer los riesgos.
Se considera abuso de alcohol a la ingesta de más de 3 tragos al día, o más de 7 tragos a la semana en las mujeres; o más de 4 tragos al día ,o más de 14 tragos en la semana en los hombres. Definiendo «trago» como la cantidad que bebida alcohólica que contiene 17 g de la substancia, que es el alcohol contenido en una pinta de cerveza (350 ml.) una copa de vino (150 ml.) o un chupito de licor (40 ml.).
El motivo de que la cantidad de alcohol establecido en las mujeres como abuso, sea menor que la cantidad establecida para los hombres, se relaciona con características físicas del sexo femenino, en general las damas pesan menos y tienen menor proporción de agua corporal, disminuyendo así la superficie en la cual se diluye el alcohol.
No existen beneficios para la salud cuando se abusa del alcohol, ocasiona aumento de peso, pérdida de la capacidad de concentración y aumenta las probabilidades de padecer algunos tipos de cáncer, además aumenta las posibilidades de sufrir una lesión por accidente o violencia, lo que constituye una causa de mortalidad en la población general.
El abuso de alcohol se relaciona con mayor riesgo de padecer diabetes, cirrosis hepática, hipertensión arterial, o posibilidad de accidente vascular cerebral. Los cánceres relacionados con abuso de alcohol incluyen: el de boca, el de larínge, el de esófago, el de mama, el de hígado, estómago y colon.
El abuso de alcohol por largo plazo, se relaciona con disminución del tamaño del cerebro y del número de células cerebrales, con problemas de aprendizaje, de memoria y resolución de problemas. Mientras más alcohol se ingiera y por más tiempo, es más probable tener problemas para dormir, trastornos del ánimo o pérdida de habilidades motoras, algunos de éstos cambios son reversibles luego de dejar de ingerir alcohol.
Sin embargo existe alguna evidencia de que la ingesta moderada de alcohol puede proteger contra la enfermedad isquémica del corazón. Puede tener un efecto elevando el colesterol «bueno» (HDL), efecto que se pierde con el abuso del alcohol ya que en éste caso, se debilita el músculo cardíaco, se eleva la tensión arterial y se favorecen los accidentes vasculares.
No existe explicación para el hecho de que el consumo leve o moderado de alcohol una vez superada la madurez, se relacione con una mayor esperanza de vida, sospechándose un efecto protector, contra la enfermedad cardíaca, el infarto y la diabetes.
Sin embargo, si una persona no ingiere alcohol regularmente, no es recomendable que comience a hacerlo, aún una pequeña cantidad de alcohol en no bebedores puede relacionarse con enfermedad o accidentes.
Hace algún tiempo se pensaba que el resveratrol, un ingrediente del vino tinto, se relacionaba con aumento de la sobre vida y una menor tasa de mortalidad, en relaciòn a los que no lo toman, relacionándolo con la dieta mediterránea, pero investigaciones recientes demuestran que, en realidad, ésta substancia por sí misma, no previene la enfermedad cardiovascular ni el cáncer, ni tampoco se relaciona con un mayor esperanza de vida.
Aunque faltan datos que lo confirmen, la evidencia sugiere que la ingesta leve o moderada de alcohol,(menor a las cantidades definidas para abuso) en la adultez temprana, puede ayudar a prevenir la demencia en etapas posteriores de la vida, con resultados difíciles de interpretar, algunos trabajos lo relacionan con la ingesta de vino, sin embargo alguna publicación, ha establecido que algunas bebidas como las espirituosas podrían aumentar ése riesgo.
La embriaguez, definida como tal en las mujeres, como la toma 4 o más tragos en una ocasión, o en los hombres como la toma de más de cinco tragos por ocasión, se relaciona con varios problemas de salud, desde hipertensión arterial e infartos, a conductas sociales de riesgo como embarazos no deseados, lesiones, violencia y suicidio.
La mayoría de los ebrios, son bebedores casuales que en ocasiones se les va la mano, se diferencian del alcoholismo, en que los alcohólicos tienen una necesidad intensa de beber, con incapacidad para parar, a pesar de los problemas físicos, psicológicos o interpersonales que conlleva esta condición.
La asociación de alcohol con bebidas energizantes, (Cafeína), puede enmascarar los síntomas de la intoxicación alcohólica, aumentando las posibilidades de lesiones, accidentes o comportamientos sociales de riesgo, además de un efecto cardiovascular deletéreo asociado.
La ingesta de alcohol durante el embarazo, aún desde antes de que la persona sepa que se encuentra embarazada, se relaciona con discapacidades, físicas, intelectuales y del comportamiento que pueden afectar toda la vida del feto expuesto, el llamado sindrome alcoholico fetal (FASD), no existe una forma segura de ingerir alcohol durante el embarazo, ni siquiera vino o cerveza.
A toda mujer que se encuentre embarazada o desee quedarse embarazada, o que no utilice métodos para evitar el embarazo, debe recomendarse que se abstenga de ingerir alcohol, y se le debe recomendar asistencia si no puede dejar de tomar.
Fuente:
Centres for Disease Control (CDC)
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