A continuación una historia de terror:
A veces pienso que existe una fuerza negativa que lo mueve todo, y que está ganando la batalla, no es pesimismo, es una observación realista, objetiva.
Quiero pensar que se trata de un péndulo histórico, que ahora está desplazado hacia la izquierda, el lado siniestro, es por ello que de nada sirve el mérito propio, más vale la incondicionalidad, de nada sirve ser honesto, más vale la complicidad, de nada sirve hacer lo correcto, es exitoso socialmente, hacer lo conveniente. Y pare usted de contar.
Esta pérdida de valores esenciales de convivencia social, ocurre justo cuando el sistema económico mundial se encuentra en su ocaso, lo que favorece que florezcan los pecados capitales, y los que profesan las virtudes, terminan execrados por tontos y no saberse aprovechar de la situación.
Pienso que lo que hace que la sociedad caiga en un espiral de violencia y autodestrucción es la impunidad que comienza por los políticos descubiertos en asuntos turbios, generando una respuesta violenta y «revolucionaria» en los electores, es así como se genera «un cambio » de gobierno, donde los que se encumbran en el poder, tal vez con muy buenas intenciones, se dan cuenta de que no existen razones para no aprovecharse.
Es así como todo contínua igual, esta vez con un régimen más radical, que proviene de las masas enardecidas, que aprovecha ésta situación de fé ciega en «un cambio» para crear un regimen de fanáticos, que siguen a ciegas a un lider que arrasa con toda oposición posible.
Cada vez con menos escrúpulos, repartiendo limosnas en vez de riqueza, mientras las grandes corporaciones que son las que siempre han estado detrás, siguen aprovechándose de los recursos naturales, cada vez con más impunidad ante el caos reinante.
Obviamente un régimen popular no puede evolucionar si hay gente pensante, que son peligrosos, de allí que el principal objetivo sea acabar con la clase media, obligándolos a expatriarse, o asimilándolos prostituyendolos bajo una premisa de incondicionalidad o usando la violencia económica, pagandoles menos sueldos,convirtiéndolos a la pobreza o usando un método más directo, la violencia común impune en las calles para reducirla al miedo y al exterminio.
¿Por qué no hacerlo en España?. Ya ha funcionado en el tercer mundo y ha rendido pingües beneficios, y si es verdad lo que dicen que «las corporaciones mientras suene la música seguirán bailando» así se cargen al planeta o a diversas culturas que se atraviesen en su camino.
Pienso que puede ser una historia alternativa a lo que viví en mi país de origen y que como un deja vu vuelve a golpearme en mi país de acogida.
Sólo es una historia de terror y como dicen por ahí «Cualquier similitud con la realidad es pura coincidencia»
O tal vez sólo se trate de «Versos de bruma»
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